Está comprobado que actualmente los consumidores son cada vez más sofisticados, perceptivos y exigentes. Para lograr satisfacer al consumidor, crece la competencia entre las empresas, esto crea una serie de variantes en algunos productos, con diferencias a veces mínimas. Todo lo anterior aumenta el riesgo de invertir en ideas e iniciativas con márgenes de ganancia menores y difíciles de realizar, teniendo como consecuencia el aumento de los costos relativos el naming, el branding y a la comunicación. Por está razón las empresas están transformando sus oficinas legales de centros de costo, a centro de ganancias. Esta tendencia nace del tomar conciencia que una idea no es solamente parte integrante del producto, sino también objeto de licencia, de compraventa o de intercambio y es muy significativa en términos económicos. Estas empresas, por lo tanto, gracias al control de la Propiedad Intelectual, adquieren valor y para concretizarlo necesitan asesoría externa, en modo de transformar la protección de la Propiedad Industrial de mera actividad de mantenimiento, en gestión proactiva de los activos.
Una herramienta concreta para las empresas
24/09/2014
7 Tiempo de leer